
Guatemala es un país lleno de diversidad, no sólo de su gente, sino también de su fauna, flora, climas. La diversidad de la gente le permite al país compartir muchas costumbres y tradiciones, disfrutar de comidas exquisitas y variadas, trajes típicos y muchos colores, y las distancias por recorrer en auto o en autobús no son muy largas, pero si llenas de muchos paisajes interesantes. La gente de Guatemala es muy amigable (en su mayoría) y cuando alguien necesita una ayudita no vacilan mucho para darla sin esperar nada a cambio, únicamente la satisfacción de poder hacer algo por el prójimo. Por supuesto, como en todos los lugares, también hay gente mala, pero lo bueno es que siempre son minoría, y tan diminuta que no le quita la belleza a la forma de ser del guatemalteco en general. El clima es una de las cosas que más me agrada de mi país. Guatemala es llamado el país de la eterna primavera, porque todo el año, los 365 dias (366 si es bisiesto), se puede encontrar flores locales y hermosas en cualquier región, y el clima es algo que ayuda mucho. Tenemos dos estaciones, el verano y el invierno, pero son dos temporadas que, dada la ubicación en la que Dios nos puso, simplemente ayudan a la agricultura y a mantener el equilibrio climático del país. Increíblemente, en Guatemala, se pueden encontrar regiones frías (llegando a menos de los 0 grados centígrados en los momentos más fríos que, por lo regular, son en los últimos meses del año, como Xela o San Marcos), regiones lluviosas como las Verapaces o Petén, regiones áridas o de calor seco (casi desérticas, pero nunca llegando a serlas, ya que la vida ronda por todas partes), regiones de calor húmedo (como las playas de Izabal) y, por supuesto, el agradable clima templado de la mayoría del país; y lo bonito es que para ir a una de esas regiones partiendo de la capital, no hay que gastar en avión y viajar miles de kilómetros para sentirse en el clima que a uno mas le guste. La temperatura promedio es de 20 grados centígrados. ¡Rico! ¿O no? La flora es increíble, sobresaliendo de todos los tipos las orquídeas y sobre ellas las monjas, siendo la monja blanca la flor nacional (también las hay amarillas y de color rosa). El clima permite tener plantaciones de flores y, en algunos casos, se exportan al extranjero. Los árboles son bastante frondosos, siendo los mas comunes los pinos y los cipreses, pero sobresaliendo las Ceibas como árbol nacional; los cafetales no faltan en cada región y el café de mi Guatemala es considerado uno de los mejores del mundo; su aroma exquisito y su sabor único lo hacen realmente especial y, dependiendo de la región que venga, tendrá cierta peculiaridad que lo destaca del de otros países cafetaleros (otra vez por el climas). La fauna realmente es variada, pero para hablar un poco de lo que tengo más cerca de mi casa, puedo comentarles que, al vivir en la Ciudad Capital, poseo un árbol de grandas (Granado) frente a mi ventana, y no hay día de Dios que varios tipos de aves se posen en el, y lo bonito es el canto tan especial de éstas, en especial los llamados chocoyitos. De las aves, las hay de todos los colores y el Quetzal sobresale como uno de los más bellos, haciéndosele mención honorífica en el libro 'La mansión del pájaro serpiente' del autor guatemalteco Virgilio Rodríguez Macal. El pájaro serpiente (el Quetzal) es símbolo de nuestra libertad y nuestra ave nacional. La posición de Guatemala, que es parte del punte que une a los dos Américas (la del Norte y la del Sur), hace posible que existan animales que pueden encontrarse en el norte o en el sur, concentrándose la mayoría de la fauna salvaje en el norte del país, en el departamento de Peten y en las regiones montañosas o boscosas de la nación. Podría pasar horas hablando de por qué Guatemala es tan especial pero, resumiendo, es porque Dios nos dio un paraíso en la tierra con tantas opciones para escoger"